Que el miedo no te paralice

Pues si te quedas paralizado por el miedo, estarás a merced de las circunstancias.

La felicidad, los momentos especiales, la emoción de vivir cosas nuevas, de efectuar cambios o comenzar una nueva etapa de tu vida, no debes aplazarlos nunca por miedo o temor.

Cuando se trata de tu proyecto o empresa, los cambios y mejoras debes tenerlos presentes en todo momento. Si requieres, por el bien de tu empresa efectuar algún cambio, debes hacerlo sin temor.

En el caso de los clientes, muchas veces por error o temor nos negamos a realizar cambios priorizando la atención hacia ellos. Debes enfocarte en aquellos clientes, cuyo perfil está en concordancia con tus valores, con el concepto de tu negocio. Y si estos  además te brindan la oportunidad de ganar más dinero, mucho mejor!

Al momento de realizar cambios con respecto a tus clientes, esta pregunta puede ayudarte a tomar una mejor decisión: ¿Qué clientes me gustaría tener? Recuerda, no te limites o te detengas, busca lo que realmente quieres, sin importar qué tan alto te parezca que está tu objetivo.

Avanza sin permitir que el miedo te detenga, al momento de tomar una decisión, si sientes algún temor, analiza si este está fundamentado o no. Es decir, verifica si el temor es real o no.

Una pregunta que me ayuda mucho en estos momentos es: ¿Qué es lo peor que me puede pasar si tomo esta decisión?. Si te haces esta pregunta veras que el cuestionártelo te permitirá ver que el peor escenario posible, no es tan malo.

La valentía radica en saber enfrentar tus miedos, superarlos y continuar con tu vida sin dejar que el temor te paralice. Con el tiempo verás que el haber hecho frente a tus miedos, te ha permitido ganar experiencias y aprendizajes invalorables.

La satisfacción de ejecutar alguna acción, luego de haber derrotado el miedo que nos impedía realizarla, es una de las mejores sensaciones en la vida. Esta sensación se incrementará, si la acción llevada a cabo redunda en mejoras positivas para ti y tu empresa.

Hazle frente a tus temores, atrévete a pensar en grande y asume riesgos que te lleven a un nuevo nivel de nuevas vivencias y experiencias, cada día.

No vivas como dice Pilar Jericó “el síndrome de la felicidad aplazada”, pues estarás sacrificando tu felicidad presente por un futuro incierto.

Dice un dicho: “O vives como piensas, o acabarás pensando como vives”

Donald Trump decía “Si de todos modos hay que pensar, más vale pensar a lo grande”

Libro recomendado: “El camino que no iba a ninguna parte” de Gianni Rodari

Resumen:

Supera tus miedos, avanza tomando riesgos y gana conocimientos que te fortalezcan como persona emprendedora. Dirígete sin temor hacia el éxito, a través del camino de la valentía.